Los argentinos vamos a votar

Entiéndase bien, vamos a "VOTAR" y no a "BOTAR", aunque ésta debería ser la acción para ese día: BOTAR a los políticos por las ventanas.

Allí están, estirando sus dedos (o garfios) para alcanzar la palanca que abre las compuertas de acceso a la casa de gobierno.

El próximo 27 de abril deberemos decidir, eligiendo entre los magros candidatos, a quien le daremos el pasaporte para andar los caminos del poder.

Ya ¡¡¡ menuda tarea!!! Y en ello nos va la salud.

En tiempos de elecciones, gran parte de la ciudadanía tenemos tantas expectativas por el tema como la que podrían mostrar los monjes tibetanos ante la realización de un desfile de modas de Kenzo o Versace.

Somos atacados por un virus conocido como "Abulicus Politicae" que ataca preferentemente a personas que han pasado por procesos eleccionarios durante varios años de su vida. Este virus crea un estado de indefensión, con síntomas de pérdida de la voluntad, náuseas y, en algunos casos severos, una indomable gastritis, habiéndose dado casos de ataques de pánico.

Este mal se agrava cuando al caminar por las calles de la ciudad, el enfermo se topa con los carteles de enormes rostros de señores (y señoras también) posando con enormes sonrisas (me pregunto de que se ríen), rubricados con epígrafes que pretenden pasar a la historia de las letras; o cuando las pantallas de TV se saturan de esos mismos señores (y señoras) declamando fórmulas mágicas sobre la economía del futuro e irrealizables planes sociales que prometen poner, a este sufrido país, en el podio del gran premio de países; asegurándonos que votando a "Juan" o a "Pedro" lograremos la salvación eterna.

A medida que se acerca el día de las elecciones, la cantidad de infectados por el virus "Abulicus Politicae" aumenta, llegando a darse el índice más alto el mismo día de los comicios, cuando una vez finalizado el recuento de los votos, los ya conocidos y sonrientes señores candidatos (y señoras) aparecen por cuanto medio de comunicación existe o pueda existir en el futuro; asegurando que "Juan" o "Pedro" es el ganador y que si alguno pierde es porque "Antonio" ha cometido fraude.

Recién el virus "Abulicus Politicae" comienza a ceder ante los efectos de una alta dosis de "Resignación 200mg" y "Esperanza 500mg" aplicada por vía endovenosa cada 6 horas y, de no mantenerse el tratamiento, atacará dentro de 4 años, cuando el enfermo vuelva a encontrarse con los mismos señores (y señoras) de siempre, sonriendo desde las fotos, mirándonos con ojos llenos de codicia desde las pantallas de la TV y sus bocas mandando andanadas de palabras con falsas promesas o magníficas fórmulas que jamás llevarán a la práctica.

El voto deberá colocarse dentro de una URNA. Según el diccionario de la R.A.E., URNA es el arca que sirve para depositar (entre otras cosas) las papeletas en las votaciones secretas... aunque también da otra definición:
URNA: caja que sirve para guardar los restos o cenizas de los cadáveres humanos...
¿Casualidad?

Lica
2003

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