Saber delegar

Se suele pensar que somos más listos que los demás y que hacemos mejor las cosas que nadie, porque cuesta mucho admitir las propias limitaciones. ¿Quién no ha pensado que su jefe es tonto(1), que sus compañeros no le llegan a la suela del zapato(2) y que sus colaboradores no saben hacer la o con un canuto?. Por este motivo se tiene cierta reticencia a delegar, salvo en los casos de vagos redomados que aun teniéndose en muy alta estima prefieren que trabajen los demás.

Sirva como ejemplo un caso flagrante de falta de delegación que lleva años manifestándose a diario en la televisión. No sé el nombre del responsable, solo que pertenece a la O.N.C.E.(3) y por tanto es invidente. No soy compradora habitual del cupón y casi no veo la televisión, pero si oigo la musiquilla de “Es la ilusión de todos los días..” y estoy cerca de la tele, me acerco para comprobar si ya se ha bajado del burro y ha delegado mi desconocido desconfiado.

El programa en cuestión es un breve espacio donde se realiza en directo el sorteo del cupón de la O.N.C.E, emitido inicialmente por Tele-5 y ahora en Atena-3, a eso de las 21 horas. Al principio lo presentaba Carmen Sevilla(4), mujer tan entrañable y campechana como torpe. Le daba gracia y frescura al programa y un inmenso anecdotario de meteduras de pata. Sin embargo, lo más chocante del programa eran las “azafatas” que misteriosamente se alejaban bastante de la belleza e iban vestidas como verdaderos adefesios, pasadas de moda y con unas prendas de trapillo.

Pasó el tiempo y Carmen Sevilla cedió el testigo de la presentación del programa a otros presentadores, pero en toda la historia del programa se ha mantenido invariante las “azafatas”, carentes de gracia, belleza y soltura, ataviadas para más inri con los trapillos infames que resaltan todos sus defectos. Esta línea continuada en la elección de las azafatas y su vestuario solo se puede achacar a que la persona que realiza la selección es un invidente, incapaz de delegar en un vidente(5).

Con el siguiente ejemplo no quisiera herir la sensibilidad de las personas ciegas, a las que admiro y por las que siento un gran respeto. Sé que son capaces de estudiar lo que se propongan, de poder vivir independientemente, de formar y cuidar una familia y de ser magníficos profesionales. Pero tienen una limitación, en este caso muy evidente, que es la ceguera y es conveniente que deleguen cuando sea necesario.

En el caso de los que tienen limitaciones menos evidentes, además de no poder hacer chistes fáciles, los tenemos que sufrir todos los días, pero en la vida real en vez de en la TV.

Lula

Más relatos de Lula, pulsar aquí
e-mail de contacto: seccionfemenina@gmail.com


(1) Cosa que suele ser cierta en el 99,99% de los casos
(2) Lo mismo pensará su madre
( 3)La ONCE (Organización Nacional de Ciegos Españoles) es una Corporación sin ánimo de lucro con la misión de mejorar la calidad de vida de los ciegos y deficientes visuales de toda España. Una Institución de carácter social y democrático. (fuente: http://www.once.es)
(4) Mi hijo mediano no se podía creer que la pizpireta mujer con cintura de avispa de la película de "Voletas imperiales", era la misma que la que presentaba el cupón.
(5) No me refiero a los Rapeles ni a las Aramís